
Todos guardan un monstruo debajo de sus camas
una sustancia viscosa
gris
inacabada
la gestación interrumpida de algún ángel
olvidado de Dios y de los hombres
todos lo alimentan cada noche
con la leche nutricia de sus sueños
y lo malcrían en mundos más allá de las palabras
en parajes de óxido y de nieve
y cuando todos salen a cumplir con el día
ellos arrastran sus ventosas debajo de otros muebles
Deambulan por la casa
son sobras de la sombra
oscuridad
Todos guardan un monstruo debajo de sus camas
una mascota para el sueño
pero nadie se fía en verdad lo suficiente
como para dejar colgar su mano
hacia el fondo de esa pena.
Edu... me encanto!!!, lo fui leyendo sin saber quien lo había escrito. Me sorprendio!!Vic.B.
ResponderEliminarLa verdad es que me pareció muy buen poema. Y es verdad que todos ocultamos un monstruo, debajo de nuestras camas o en nosotros mismos.
ResponderEliminarBesos!
Gracias, Natalia, gracias Victoria. Es siempre un placer y un riesgo mostrar el trabajo personal. Son estas pequeñas cosas, como diría el Nano, las que lo estimulan a uno a continuar en el camino para el cual, la poesía nos escogió.
ResponderEliminarmuy buena poesía como la que haces siempre, querido amigo.
ResponderEliminarOrlando
muy bueno el verso inicial que descubre algo universal
ResponderEliminarme gusta luego como lo desarrollas con la poética cotidiana de salir y el monstruo merodeando por la casa
el verso"son sobras de las sombras" es muy bueno!
todos lo tenemos, lo bueno es darse cuenta para combatir con él y no dejar que nos engrulla del todo...
un placer la lectura
cariños
Honda psicologìa expresada poèticamente. Buena conjunciòn. Felicitaciones. Susana
ResponderEliminarGracias por invitarme a esta casa. Yo tampoco sabía quien era el autor mientras leía el poema y me gustó muchísimo porque tiene todo el oficio de una bronca sabia y bellamente expresada.
ResponderEliminarJorge Luis Estrella
Bellísimo el poema, Eduardo.
ResponderEliminarcarlos